Un buen ejemplo de periodismo impreso digital



Esto empieza a parecerse mucho a cómo me gustaría leer el periodismo impreso en una pantalla.

Sólo le pediría que el tablet tome más como referencia la tinta digital que el ordenador portátil, que no devore batería, que se pueda leer en la playa y con una interactividad muy semejante a la del ejemplo.

El reto está en que esos contenidos son más caros de elaborar, verdaderamente multimedia, totalmente convergentes: el nuevo periodista tendrá que ser, si esto sale adelante, más profesional que nunca.

Comentarios

  1. Esto me recuerda a algo. Claramente, mucho más desarrollado y elaborado, pero en el fondo es el mismo concepto ;)

    Por cierto, echo en falta que pongas un link a tus posts en el facebook. Me he perdido unas cuantas entregas porque no me acordé de pasarme por aquí...

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. Esto me recuerda a algo. Claramente, mucho más desarrollado, pero en el fondo es el mismo concepto ;)

    Por cierto, echo en falta que pongas links a tus posts en el facebook. Me he perdido unas cuantas entregas porque no me acordé de pasarme por aquí...

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  3. Todo eso está muy bien, pero no garantiza calidad periodística. En cualquier caso, a mí me pillará jubilado o en fase de. Espero. Saludos.

    ResponderEliminar
  4. Tienes razón, Elena, es el mismo concepto.

    Y migramundo, claro que esto no garantiza la calidad, de hecho si las editoras optan por esta estrategia habrá quien crea que con hacerlo bonito es suficiente y tú y yo sabemos que eso no es así. Yo les diría que no destinen a un soporte como este más de lo que destinan a las plantas de impresión y a la distribución, de hecho debería quedar margen para incrementar la calidad, aunque habrá que verlo.

    Y de jubilado nada, que esto está a la vuelta de la esquina y a ti te queda mucha tinta que exprimir.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Antonia San Juan no es un hombre

Aguacero de albóndigas estereoscópicas

Cambio horario: a quien madruga... le salen ojeras