Sólo dos horas más de clase
Un experto en técnicas para hablar en público comentaba ayer que una buena intervención requiere una preparación mínima de tres semanas. Sobre todo si es una charla breve, que motive, una charla eficaz. Hay que dominar el tema, ensayar ante el espejo, repetir una y otra vez el inicio, los cambios de ritmo, captar la atención, mantenerla y recuperarla cuando baja, sin olvidar naturalmente el objetivo principal: que el mensaje se fije en la mente del receptor. Si usted ha tenido que hablar en público, hacer una presentación, incluso un mínimo discurso familiar, conoce el miedo escénico, sabe el trabajo que da, la tensión que provoca. Lo de menos es que deba hablar un minuto, diez o sesenta. Claro que eso se debe a que no es profesor. Porque al parecer, los profesores no necesitan preparar sus clases y sólo trabajan cuando las están impartiendo. De hecho, algunas administraciones han decidido transmitir la idea de que los profesores sólo trabajan las horas lectivas que les corresponde