Gobernar sin presupuestos
Decidir adónde va el dinero es probablemente lo más importante de la gestión pública. Por ello resulta frustrante ganar unas elecciones y no contar con un presupuesto propio. No me refiero a Feijóo, que ganó y no gobernó. Ni a Sánchez que, con su hype (tradúzcase por bombo publicitario) hasta el próximo lunes, nos hace olvidar que gobierna sin presupuestos. Sino a algo mucho más local: la Universidad de A Coruña. En concreto hablo del cuarto rector perteneciente a la misma corriente que lleva gobernando la universidad coruñesa desde hace 20 años. Ha decidido no presentar por ahora un presupuesto propio tras comprobar que hereda un imprevisto agujero de más de 3 millones. En realidad se trata de una cantidad ridícula para un presupuesto de más de 180. Claro que las magias financieras pueden ocultar otras sorpresas. De todos modos, no es el único motivo por el que ha decidido renunciar a su propias cuentas. También lo explica con el hecho de que se está instalando un nuevo sistema de in...